Podríamos definirlo como la entrada por excelencia, el nuevo modelo en tecnopolímero de la empresa lombarda, un producto pensado para los principiantes pero también para los más expertos que buscan una solución sencilla y económica para el bajofondo
Jack Cubeddu
El camino trazado por las UP ha elevado de hecho el listón de este tipo de aleta gracias al uso de un tecnopolímero más eficiente y a una ligereza que faltaba entre las “plásticas”. Siguiendo esta línea, nace una nueva aleta creada y diseñada para aquellos que dan sus primeros pasos en la pesca y el buceo, pero también para los expertos que buscan un producto de tamaño contenido y fácilmente manejable en poca agua, la Storm. Lo que salta a la vista de inmediato es la longitud, 10 centímetros más corta que la media (mide 79 centímetros) y con una ligereza sin precedentes. Además, es la primera vez que C4 propone una aleta con el calzante moldeado junto a la pala, sin kit de tornillos y sin posibilidad de desmontaje. Una peculiaridad que podría hacer torcer el gesto a los “habituales” de los modelos desmontables, pero que en realidad esconde una ventaja importante en los tiempos y costos de producción y, consecuentemente, en el precio final al público, que es realmente interesante. Examinando la estructura de la Storm, se notan los water rail pre-moldeados en la parte final de la pala, mientras que a lo largo de ambas superficies hay ligeras nervaduras, que sirven para múltiples propósitos. En primer lugar, aseguran la uniformidad de movimiento de la pala sin que ésta ceda en las fases de movimiento. Además, asociadas al tecnopolímero elegido, permiten un elevado retorno elástico y una notable resistencia a la rotura, todo esto sin comprometer su suavidad. Continuando con el análisis, se notan otras dos nervaduras mucho más marcadas, presentes en la parte inferior, en el centro, en correspondencia con la inclinación: sirven para proporcionar una conexión directa al calzante y, consecuentemente, una óptima transmisión del movimiento generado por la pierna. También en la Storm, la relación entre la pala (29 grados) y el calzante (3 grados) genera una angulación útil para mantener el tobillo en una posición de descanso y reducir el estrés durante el uso. El diseño de la pala se caracteriza por una coloración completamente negra con la impresión de algunas líneas que forman rayos. En el frente y en la parte posterior, la marca opaca C4 y la inscripción Storm. Para completar todo, el imprescindible calzante 250, que hemos tenido la oportunidad de probar y someter a estrés asociado a muchas versiones, tanto en carbono como en tecnopolímero, apreciando su ligereza y comodidad. Al no tener largueros, el 250 pre-moldeado con la pala Storm permite una transmisión directa de nuestro movimiento, sin condicionar la flexión o la dureza de la propia pala. La nueva Storm se ofrece al público en tallas que van desde la 36/37 hasta la 44/45 y con un precio muy interesante de apenas 55 €.
En el mar
Las marejadas de finales de invierno representan ese momento crucial de la temporada en que el bajofondo puede regalar todo o nada. Decido así improvisar un par de horas por la tarde para jugar entre las olas con las nuevas Storm. La ventaja de sus dimensiones me facilita desde casa, en la preparación del equipo, permitiéndome, gracias a la longitud contenida, poder meterlas fácilmente en la bolsa. Son aproximadamente las tres de la tarde y con el equipo puesto es el momento de ponerse las aletas. En diversas ocasiones he tenido la oportunidad de apreciar la comodidad del calzante 250, pero en este caso, dada también la ligereza de la pala, parece realmente que no llevo nada en los pies. La longitud de la pala y el peso total de la aleta (apenas 600 gramos en la talla 42/43, la que probé) dan esta extraña y placentera sensación.
¡Al agua! Noto enseguida que al moverme en la superficie, a pesar de un mínimo de corriente, la generosa ola y el peso excepcional para el bajofondo, la Storm responde bien, sin mostrar límites debidos a su longitud. Longitud que, sin embargo, ya desde las primeras acciones, muestra todas sus ventajas. Son, de hecho, fáciles de mover, de insertar en espacios pequeños, de ocultar detrás del cuerpo. No cabe duda de que la verdadera ventaja para quienes “mastican aletas”, pero también para los principiantes, es la completa gestión incluso en batimetrías insignificantes, donde la nueva Storm se desenvuelve con maestría. Nada desdeñable es, en cambio, la respuesta a mayores profundidades, como en la franja de los 15 metros. La aleta en este caso resulta suficientemente eficiente, permitiendo una buena velocidad de crucero tanto en la fase de descenso como en la de ascenso. Sin embargo, resulta menos vigorosa en el despegue del fondo y, poco a poco, más “pesada” en la pierna en la sucesión de inmersiones. Esto se debe a que su longitud, que facilita enormemente la acción en el bajofondo, muestra sus límites en las inmersiones en aguas medias y profundas. Pero es normal. La Storm nació para acompañarnos en poca agua y es allí donde debemos usarla. Pasadas unas tres horas y después de haber capturado dos peces para la cena, se vuelve al punto de partida. La aleta pasa con buena nota la prueba en el bajofondo, “surfeando” las olas y manejándose en espacios pequeños sin causar molestias ni golpear accidentalmente contra las rocas en las largas acechanzas. Menos eficiente, como se ha dicho, en la sucesión de inmersiones más profundas, pero aun así con un comportamiento suficiente para garantizar alguna incursión un poco más honda. Excelente la comodidad del calzante 250 y fácil de poner y quitar, incluso con el calcetín de 5 milímetros. Cierra el círculo una relación calidad/precio decididamente interesante, que hace la aleta accesible para todos, incluso para quien decida comprarla como modelo adicional, para usarla en ciertos tipos de pesca. En resumen, un modelo para quien comienza o para quien, ya experimentado, busca una aleta para el invierno o, en todo caso, para usar en los primeros metros.
Calificaciones
Estructura: 8 A través de la elección de nervaduras específicas permite una excelente respuesta en relación con la longitud. También son válidos los pequeños water rail finales, que mantienen la pala en la trayectoria.
Materiales 8 Un tecnopolímero “decidido”, que asegura a la pala un buen retorno elástico, todo ello manteniendo una interesante suavidad.
Comodidad: 9 El calzante 250 siempre logra obtener excelentes calificaciones. Unido a la inclinación de la relación pala/calzante se obtiene una aleta que no fatiga el tobillo.
Rendimiento: 7,5 Indudablemente la reina del bajofondo. Su longitud contenida permite una fácil gestión incluso en los espacios más angostos. Sin embargo, esta misma longitud condiciona las inmersiones más profundas, donde la aleta muestra sus límites.
Diseño: 8 Presenta un acabado fresco y juvenil, con las marcas opacas que generan un agradable efecto de “ahora se ve, ahora no se ve” según la inclinación a la luz.
Relación calidad/precio: 10 El punto fuerte de la Storm. Con sus 55 € al público, no tiene rivales en el mercado.
Lo mejor La gestión en el bajofondo y un precio sin competencia.
Lo peor En las inmersiones más exigentes muestra sus límites.